miércoles, 27 de abril de 2022

Ítaca IX: Amar lo que haces

Me hicieron con mucho amor y nací un 04 de agosto de 1984. Con mucha alegría puedo decir que fui el lazo indisoluble que unió a mis padres.


Mi modelos:
Entre Lima y Huánuco, con primos, primas, tíos, tías, y abuelas con los que compartí mil aventuras y experiencias que me fueron formando. Tengo un tío amoroso que me enseño muchas formas de demostrar amor (tío Numi, gracias), tengo otra tía que hace los desayunos (jugos) más ricos del mundo (tía Rochi, gracias a ti mi comida favorita del día son los desayunos, quizás ni te diste cuenta pero los chiquititos siempre están atentos a todo, a los detalles), tengo otra tía muy capa que me enseño que las mujeres somos imparables profesionalmente, gracias a ella, mi tía Pocha, tuve mi primer trabajo. Tengo un tío que tiene una paciencia infinita (al menos conmigo xD) que ama las plantas, la cultura, el campo, me hacía sillas y mesitas para jugar con sus propias manos y me llama "Claudita" siempre, siempre, él es mi tío Toto. Mi familia, de ambos lados, paterno y materno, son grandes, así que la lista de aportes que han hecho a mi vida sería larga, pero no quiero dejar de mencionar el aporte que mis padres hicieron, mi papá hombre sin igual, lo amaban en su trabajo... Yo crecí viéndolo enseñar, rodeado de categráticos, entre sílabos, trabajos y proyectos con "sus niñas y niños" de la universidad... y es que era tan creativo fue de los primeros que vio entre los empresarios de Villa el Salvador una fuente de enseñanza para sus alumnos, alguna vez lo acompañamos con mi mamá, sus alumnos escuchaban atentos y fascinados las historias y anécdotas de aquellos empresarios emergentes. Algo que admiro mucho de mi padre es la pasión por su trabajo, por la docencia. Mi mamá, por otro lado, tenía un don para las relaciones interpersonales, imparable si es que algo se proponía. Recuerdo que alrededor de mis 14 años vi cómo floreció, se reinventó para dar lugar a una mujer increíblemente fuerte y decidida, alguna vez me dijo que se dio cuenta que necesitaba, además de ser madre, esposa, amiga, etc., el ser mujer, para y por ella.

Pasiones:
Al igual que Wendy Ramos, nuestra querida clown, tengo avidez por aprender, son muchas mis pasiones: la psicología, el comportamiento humano, sus motivaciones, la tanatología, la logoterapia, la educación, la meditación, LAS NEUROCIENCIAS, , la administración (es la carrera que seguí), me gustan las manualidades (ardilla, cerámica, pintar, maquillar, ...crear)… y etc.

A la vuelta de la esquina los 40:
Tengo 37 años, a veces me digo: "Tienes casi 40 y no has hecho nada con tu vida, ¿Qué puedes decir en tu defensa?" y otras conversando con amigas les digo: "me siento de 16, siento que estoy jugando a ser grande y que tengo toda la vida por delante... porque no llego a ninguna Ítaca (si siguen mi blog o si han leído el poema de Konstantino Kavafis lo entenderán) y, además, me siento con energía, y sigo queriendo meterme a aprender "n" cosas.

Analizando mi autodiálogo y mis conversaciones puedo decir que:
  • Me tengo cero paciencia a veces, aun tengo que trabajar en mi autodiálogo, a veces me doy con palo. Quisiera aprender a ser más autocompasiva, a aceptar mi vulnerabilidad.
  • Por momentos me presiono para "llegar a algún lado", pero no debería hacerlo, mi viaje es largo y rico en aprendizajes, "sigue aprendiendo, pequeña Clau, pero con consciencia".
  • Al conversar con más personas puedo ver mi vida desde otra perspectiva y mi trato es mas amable conmigo misma.
  • La edad cronológica no es una limitante, lo es la mentalidad.

Wendy Ramos:
No he sido muy fan de Wendy, pero gracias a BBVA Aprendemos Juntos pude conocerla más y descubrí en ella una gran mujer, clown, actriz, maestra,... Tal fue mi sorpresa que me inscribí casi inmediatamente al curso que ofrece por Netzun "Amar lo que haces", y ella me ha inspirado a volver a escribir y a amar lo que hago, porque lo que hago también soy yo y una manifestación de mi amor propio.

Un extracto del poema de Kavafis:

"Pide que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!-
a puertos nunca vistos antes.
Detente en los emporios de Fenicia
y hazte con hermosas mercancías,
nácar y coral, ámbar y ébano
y toda suerte de perfumes sensuales,
cuantos más abundantes perfumes sensuales puedas.
Ve a muchas ciudades egipcias
a aprender, a aprender de sus sabios".

Ámense, amen todo lo que hacen.

Claudia.